La novela se absorbe prácticamente desde el principio hasta el final; hay tantos giros que te tienen atrapada por completo a la historia. La trama me ha gustado mucho, aunque hay muchas escenas que son tan tan surrealistas que me han resultado poco creíbles. Otra cosa que me ha chocado bastante es que, la narrativa, el lenguaje utilizado, solo me hacía evocar a una novela histórica; me costaba pensar que era contemporánea. Creo que la palabra que más se repite es: “malicioso”; palabra que en la actualidad apenas usamos. En general es una novela perfecta para pasar un buen rato sin complicaciones. |