Delfines de plata

Un hotel de cinco estrellas, situado en la más estratégica posición en el centro de Madrid, justo enfrente del Congreso de los Diputados, es el escenario de esta novela que destila adrenalina pura.

Salvador Cano es el director del Atheneum, un hotel de cinco estrellas de gran lujo, adonde acuden lo más selecto de la sociedad internacional. Está orgulloso de haberse rodeado de una plantilla eficiente, que ofrece el mejor servicio que se puede lograr. Poco se espera que ese majestuoso hotel se convertirá en el teatro de una intriga que va más allá de los robos que se están produciendo en las habitaciones.

Aunque ya tenía este libro en el punto de mira, sobre todo después de ver que lo habían adaptado al cine (aunque no pude ver la película), ha sido cuando salió elegido en un club de lectura que por fin me puse con él. En este club la lectura se hace por tramos para que a la hora de comentar todos lo hagamos sobre lo mismo; y esta semana tocaba comentar el primer tercio del libro. Pues yo no he podido parar en ese tercio, he tenido que continuar hasta acabarlo.

Me ha gustado mucho como ha descrito los personajes; lo ha hecho de tal forma que incluso sin haber entrado aun en la trama, ha conseguido atrapar mi atención, y engancharme a la historia. El ritmo es frenético, la tensión criminal de lo intensa que es, y su lectura es tan ágil que en pocas horas puedes terminar el libro.