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El primer libro de Judith y el último que he leído... Una historia que demuesta que nada ocurre porque sí, que el destino está escrito y que lo que creemos casualidades, en realidad nos conducen a lo que teníamos predestinado. No hay un sólo personaje que no me haya tocado la vena sensible, aunque sin duda Martina se lleva la palma. Y que decir de su padre....Al principio desconcierta, pero cuando vas conociendo su historia no puedes dejar de admirarla y desear que su vida cambie, que por fin obtenga lo que desea. Ana es el caso contrario, comienzas teniéndole un poco de tirria y después de ese retorno tras huir como la loca que parece, tan sólo deseas que vuelva a ser aquella Anabel que descubrimos de repente. A medida que he ido leyendo página tras página, me he dado cuenta de lo profundo de la vida de cada personaje y he entendido el significado de "nada en la vida ocurre porque sí", el destino decide y en este caso a pesar del dolor del pasado y los problemas presentes, decide bien. Un pequeño apunte. No sabía que iba a conocer a un personaje futuro que es una maravillosa persona. Hay que leer en orden! |
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