InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de Inquilinas_Netherfield


Inquilinas_Netherfield
11 March 2019
Por favor, admiremos durante unos idílicos instantes la belleza de la portada...

... Venga, unos idílicos instantes más, que no se diga.

xD.

Hace ya un año reseñé El gusano de seda, la segunda parte de la serie de Cormoran Strike, y he estado aguantando todo lo que he podido para leer esta tercera parte porque quería hacerlo cuando ya hubiese fecha de publicación en España de la cuarta, Lethal White, que salió hace un porrón de meses en UK. Como parece que Salamandra no tiene prisa por sacarla (shame on them! xD), pero yo sí la tenía por saber cómo continuaban las idas y venidas de Cormoran y Robin Ellacott, pues nada, a saltarme planificaciones y buenas intenciones a la torera.

Han pasado unos meses desde los sucesos de El gusano de seda, y en la agencia de detectives de Cormoran Strike todo sigue su ritmo normal... hasta que Robin abre un paquete dirigido a ella que contiene la pierna cercenada de una mujer joven con una nota en la que hay escrita la estrofa de una canción que hace que Cormoran lo tenga claro desde un principio: el remitente de tan pintoresco envío tiene que ser alguien de su pasado, y es alguien que quiere hacerle daño a él de manera personal. Cuatro nombres le vienen directamente a la cabeza, así que se pone en marcha la maquinaria para averiguar la identidad de la víctima (y propietaria de esa pierna) y la del culpable de entre esos cuatro sospechosos. El problema está en que su relación con la policía (a la que ha dejado en ridículo en los dos anteriores casos), no es todo lo buena que debiera y encima se deciden por investigar al único sospechoso de los cuatro que Cormoran casi descartaría desde el principio. Por tanto, Robin y él comienzan a investigar por su cuenta, pero el tiempo que pueden dedicarle es limitado porque tienen otros casos (pocos y por ello imprescindibles para la supervivencia de la agencia), y el asesino no se anda con chiquitas: tiene muy claro que una de sus víctimas (porque habrá más víctimas, naturalmente) será Robin.

En los dos libros anteriores ya quedan bien marcadas las pautas que siguen las novelas de esta serie: ritmo pausado (que no lento) con picos de acción que hacen que la historia avance sin prisa pero sin pausa, y en la que son tan importantes los personajes como la propia investigación en sí. Todo esto sigue formando parte de El oficio del mal, en la que además el tonillo socarrón y agudo de la Rowling (me niego a llamarla Galbraith, sorry) empapa buena parte del libro. Como novedad en esta novela añade un nuevo elemento: el punto de vista del asesino, del que conocemos no solo sus andanzas y sus pensamientos, sino que además confirma la sospecha de Cormoran: quiere vengarse de él, arruinarle la vida sea como sea, y Robin, "la secretaria" (como él la llama), es el vehículo perfecto para darle donde más le duele.

En lo que respecta a Cormoran Strike, si en el primer libro el foco de atención se centraba en su tormentosa relación con su novia de toda la vida, y en el segundo libro lo hacía sobre su discapacidad, en este lo hace sobre un tema que en las anteriores tramas estaba presente pero siempre se trataba de pasada: la más que sospechosa muerte de su madre. Leda era adicta a las drogas y su muerte fue calificada de suicidio, pero Strike siempre ha creído que fue asesinada por su marido de entonces, un cantante con ínfulas de satánico y también drogodependiente, que resulta ser uno de los sospechosos de la historia. Tirando de este hilo conocemos mucho más de cómo fue la vida del Cormoran adolescente en un hogar disfuncional como ese y de cómo lo que ocurrió con su madre sigue siendo una losa que lleva encima y que es incapaz de quitarse de encima. Por lo demás, Cormoran es un personaje muy estable estructuralmente hablando: el Cormoran del primer libro era un Cormoran muy complejo en cuanto a personalidad, pero muy metódico y más equilibrado de lo que aparentaba en muchos aspectos, y es el Cormoran que seguimos teniendo. Y además es mucho más honesto consigo mismo que Robin.

Y es que Robin... ains, Robin... Yo quería ser Robin en el primer libro, quería entrar a trabajar en la oficina de un detective desaliñado e inteligente como Strike, y demostrar mi valía dando el salto de secretaria a ayudante del detective con trabajo profesional de calle y responsabilidades. Era un personaje con el que resultaba muy fácil empatizar: una joven idealista, inteligente y muy currante que prefiere ganar cuatro duros en lo que le apasiona y ser feliz, a ganar miles en un trabajo que odia siendo infeliz y sintiéndose desaprovechada. Peeeeerooooo.... en el segundo libro ya tuve mis más y mis menos con ella y empecé a alejarme del personaje, no tanto por su labor en la agencia de Cormoran como por cómo maneja su vida privada y su relación con el tontilán (por no llamarle otra cosa) de Matthew. Ya en este tercer libro directamente le he puesto tres velas negras (y como encuentre más en los cajones, más que le pongo). Y eso que conocemos un hecho de su pasado (hecho que yo veía venir desde el primer libro) que supuestamente explicaría su comportamiento en muchos aspectos, pero no, a mí sigue sin convencerme que sea tan espabilada para algunas cosas y tan acomodaticia para otras.

Os decía arriba que en esta novela son tan importantes los personajes como la investigación, y es que sí, las vidas personales de Cormoran y Robin forman parte del tronco que conforma el hilo conductor de todos los libros, tanto por separado como en su vertiente conjunta. Resulta evidente (al menos para el lector, para ellos no tanto) que estos dos prefieren estar el uno con el otro que con el ligue de turno (en el caso de él) o con su impresentable prometido (en el caso de ella), pero aun así toman decisiones bastante alejadas de lo esperable en este tipo de situaciones literarias. Resulta complicado explicar esto sin hacer spoilers para que desde fuera no parezca lo de siempre, pero creedme, la Rowling le da un giro bastante diferente que solo se percibe bien si se leen los libros, y delimita la interacción entre estos dos personajes de un modo fantástico. Y vamos, que la Rowling sabe de sobra el interés del lector en este tema y juega mucho, muchísimo, con él. Que una no se hace muchimillonaria escribiendo libros y siendo tonta (... bueno, algún caso habrá, pero ese es otro tema xD).

Y ya que hablamos de la Rowling, quizás solo es percepción mía, pero cada vez que leo un libro de esta serie la sensación con la que me quedo es que se lo pasa bomba escribiéndolos. No se corta, da igual que estemos ante una novela de género, da igual que estemos a la caza de un asesino... ella hace lo que le viene en gana: se entretiene en describirte lo que le apetece, ese detalle nimio que solo le interesa a ella, o en señalarte esa otra cosa que no tiene nada que ver con la trama pero que está ahí, en el escenario que ella imagina, y quiere que le dediques el segundo de atención que se merece. Y aun así, sin que te des cuenta, te lleva de arriba a abajo por toda Inglaterra de la mano y va construyendo como quien no quiere la cosa una trama que puede parecer sencilla pero que en realidad es muy inteligente y está muy organizada y bien distribuida sobre el papel.

No os voy a contar nada de la investigación en sí, como siempre, así que termino declarando lo evidente, que me lo paso muy bien con esta serie y que me parece muy entretenida, y os aseguro que no las tenía todas conmigo cuando la empecé. Yo soy muy potterhead, que vaya por delante, pero eso no quiere decir que todo lo que esta señora escriba me vaya a gustar porque sí, y de hecho, a pesar de las buenas críticas y lo mucho que gusta en general, Una vacante imprevista me dejó bastante indiferente. Tanto, que hace unos años la adaptaron en formato miniserie y todavía sigo intentando echarle ganas para verla.

Las adaptaciones de los libros de Cormoran Strike sí las estoy viendo, aunque cambian cosas sustanciales como suavizar el personaje de Matthew para hacerlo más... ¿majo? ¿menos impresentable? Imagino que para que las decisiones de Robin no parezcan tan estúpidas como parecen en el libro (lo que me demuestra que no voy tan desencaminada en mi opinión sobre este personaje). En fin, que para no faltar a la tradición, termino reseña con el tráiler de la adaptación de esta tercera novela de la serie :)
Enlace: https://inquilinasnetherfiel..
Comentar  Me gusta         10



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Apreciaron esta crítica ()(1)ver más