El libro me ha sorprendido mucho y para bien. Me sorprendió desde el principio, no me esperaba lo que pasó. Si bien es cierto que han habido partes que se me han hecho muy largas y pesadas por el exceso de descripciones y otras que me recordaban a películas varias, había otras que no quería que terminaran nunca. En este libro conocemos a Garyan y Marisa, una pareja que se había conocido de un modo inesperado y que jamás pudo separarse hasta que la muerte se cruzó en su camino. El alma de Garyan se negaba a abandonar a Marisa y con ello le causaba a ella más dolor, hasta que se dió cuenta y decidió aceptar una oferta que implicaba perder la memoria y no volver a recordarla. Garyan renace en Daniel, un ángel negro, el cual lucha por liberar a Berlín de los demonios que allí habitan, lo que no sabe es que se encontrará con Marisa y que eso hará que algo pase con su cuerpo, el cual le hace sentir cosas raras y tener visiones extrañas. Mientras, Olivier, el peor de los demonios que fue desterrado haría unos dos mil años, sintiendo que ha llegado el momento de volver a declarar la guerra resurge de su destierro y pretende acabar con la humanidad del mundo haciendo cumplir una profecía. La verdad es que el libro se vuelve adictivo y llega un punto que no puedes dejar de leerlo, necesitas saber más, y aunque lo que para mi eran las mejores partes se me hacían siempre cortas he de decir que el final me ha gustado (aunque creo que tiene un fallo importante o yo lo he sentido así, pero vamos, que me gusta igual) |