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El Hada Madrina ha maldecido el mundo de Fabel y Roja es contratada para acabar con ella. Eso sí, irá acompañada en su misión pero ella está acostumbrada a trabajar sola y todos esconden secretos. La trama está bien y la manera de unir personajes de los cuentos de hadas en una misma historia me gustó. Además de ir descubriendo parte de ella con la propia protagonista. Esto resultó interesante e intrigante al principio pero terminó por hacerse repetitivo y consiguió que no me metiese del todo en la historia. El diálogo es escaso. Demasiada explicación y reflexión para mi gusto. Eché de menos más conversación. Conste que puede que la autora lo haya hecho adrede por el carácter solitario de Roja ya que todo está narrado desde su punto de vista. Los pensamientos de la protagonista acaban resultando pesados. Desde el principio se da a conocer su carácter y su forma de ser, ya queda claro y, aunque se vaya viendo el poco cambio que lleva, me sobraron muchas de sus reflexiones que, al final, nos venía diciendo lo que ya se había dicho. Eso sí, los personajes secundarios me han agradado bastante. Por otro lado están las escenas de sexo. Si bien me gustan este tipo de escenas, no eran tan necesarias en esta historia, las sentí metidas con calzador porque sí que sucede algo importante pero podía haberse ahorrado toda la descripción. Que están bien, pero lo pienso y la historia hubiese quedado igual sin haber narrado cada acto. Tengo la sensación de que empezaron y acabaron muy repentinamente. En definitiva, una historia que tiene potencial pero no acabó de estar bien ejecutada para mi gusto. |
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