Hay libros que destacan por darle la vuelta a lo que uno espera encontrar en ellos y creo que ese el caso de El silencio del bosque. Como en todo buen libro policiaco, nos enfrentaremos a un crimen y recorreremos sus páginas para acompañar a los detectives en la resolución de todo el embrollo. Muchos secretos saldrán a la luz, se resolverán incógnitas y sucederán todas las cosas que esperamos en una novela de este estilo, pero lo que creo que le da color, personalidad y ese 'no sé qué' a esta historia, está en otra parte. Son los personajes, los detectives, sus vidas, sus historias, es allí donde está la esencia, lo profundo y lo adictivo de este libro. Tana French escribió una buena historia policiaca, pero creo que escribió una historia sobre detectives aún mejor. La relación entre Cassie y Rob, lo que no se dicen, lo que intuimos, lo que van descubriendo sobre sí mismos y sobre el otro, eso es lo que le da sustento y color a esta historia. La parte del crimen está bien, cumple con lo que promete, pero la grandeza, lo que a mí me enganchó y me hará volver a los libros de esta autora, son sin duda, las ganas de meterme en las vidas de esos detectives, en sus complejidades, en sus frustraciones, traumas, silencios y secretos. |