El Dios Pálido: y otros relatos de terror

En primer término debo reconocer que los libros como El dios pálido me reafirman en mi enamoramiento de las recopilaciones de relatos de terror. Se trata de una novela corta con una selección de siete relatos a través de los cuales Nicolás Francis se nos presenta como un gran conocedor y experto del género. Los relatos son muy diferentes entre sí, no hay un nexo de unión entre ellos pero todos forman historias perfectamente desarrolladas en ambientaciones muy diferentes.

Se abre el libro con la historia que comparte título con la obra en conjunto y que va a servir de cierto hilo conductor y conclusivo a los relatos que conforman el grueso de la novela. Por lo demás, nada es compartido y pocos puntos en común hallamos en las diferentes tramas. Nos encontramos con historias más urbanitas, otras que transcurren en contextos rurales, naturales e incluso en plena Segunda Guerra Mundial, entre otros. En todos habrá algún elemento sobrenatural que enriquezca y oscurezca el argumento, y no puedo ocultar que todas ellas me han dejado con ese mal cuerpo habitual de la buena literatura de terror y, sin embargo también, esa sensación morbosa (casi macabra) de desear saber más.

Me han sorprendido especialmente unas ambientaciones tan diferentes y, sin embargo, todas ellas tan efectivas en muy pocas páginas conformando historias perfectamente desarrolladas y terminadas. Cabe señalar que hay escenas macabras y truculentas pero sin regodearse en ellas; de hecho considero que al autor no le resulta necesario incidir constantemente en este aspecto para hacernos sentir esa incomodidad tan genuina de este tipo de literatura. Si se tuviera que establecer un pequeño patrón entre las historias, pudiera apuntarse a que todas ellas ocultan perfectamente el misterio que encierran hasta sus últimas líneas manteniendo la tensión de principio a fin.

Para concluir quisiera señalar que me encantaría leer mucho más del autor. A pesar de mi predilección por las colecciones de relatos, estoy segura de que una novela de Nicolás Francis con una única trama no decepcionaría en absoluto por lo que he podido intuir a través de esta antología. El autor demuestra tener unas influencias tan dispares y acertadas, una imaginación sobresaliente y una redacción tan certera y ágil que sin duda nos va a ofrecer muchas alegrías literarias en el futuro.