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Una Bruja inmortal sin más dios que el Astado, nos va contando como ha sido la historia de la magia y de las mujeres que han tenido el don de manejarla desde el principio de los tiempos hasta casi nuestros días. Comienza con las edades más primitivas, en las que las herramientas eran toscas y los conocimientos rudimentarios tanto para el día a día como en temas místicos y religiosos. Se acercaba al ser humano adaptándose a las diferentes circunstancias que lo rodeaban y de su mano nos daremos un paseo por la Historia: celtas, griegos, romanos pasan por su lado deteniéndose un poco más en el ilustre Salomón, las leyendas artúricas o la inquisición española. De su mano vemos como la magia va evolucionando así como todo lo que la rodea: el término bruja cambia de connotaciones y acepciones dependiendo de la época, siendo en ocasiones una palabra sinónimo de algo bueno y en otras un término a evitar. Los sinónimos y términos análogos no tardan en aparecer para diferenciar a quienes llevan a cabo diferentes tipos de magia, como las brujas en sí mismas, las hechiceras, las hadas o las nigromantes, pero eso no fue nada en comparación con la degradación y perversión que sufrió cuando llegó el cristianismo y la inquisición. Junto al término, la figura de la mujer también va sufriendo altibajos: pasa de ser reverenciada en algunos lugares, pudiendo llegar a ser sacerdotisas, cultas y sabias o meras vasijas para contener a la siguiente generación. Curiosa es la asociación que en algunas épocas se ha hecho a la figura de la bruja como una mujer contraria a la maternidad y con ansias de saber y de libertad y el miedo que eso ha despertado en sus contemporáneos. Pero la Bruja no solo se limita al paso del tiempo sino que nos va detallando cómo es su vida, los sentimientos que hacen mella en ella, sus errores y aciertos, los padecimientos que sufre y las alegrías que a veces la envuelven. Nos describe diferentes épocas, como se vivía, la cultura, los dioses que se adoraban y los personajes más relevantes así como la forma en que la Bruja se acercaba a ellos. Nos muestra los tipos de rituales que se llevaban a cabo, material utilizado y la finalidad de los mismos; se intercalan con fragmentos de libros y al final hay unas cuantas páginas dedicadas a libros, canciones o películas en las que encontramos diferentes tipos de brujas. Me ha encantado que mencione a Tino Casal y a Marvin Harris. En general es un libro que cuenta con un gran trabajo de documentación que me ha gustado bastante y resulta muy ameno, con el que he aprendido mucho sobre brujería, mitología y las diferentes culturas que nos describe. No te lo pierdas. |
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