La guardiana del tejo

Judit Fernández debuta en el mundo literario con La guardiana del tejo un increíble viaje desde la Inglaterra de la Primera Guerra Mundial hasta los celtas que habitaban Cantabria durante el Imperio Romano. 

Tras la muerte de su padre, Briand decide viajar desde Inglaterra a Santander para instalarse en la casa familiar junto a Annie y Robert las dos personas que han cuidado de ella desde que era pequeña. Allí conocerá al joven Marcus, un inglés que se ha instalado también recientemente en estas tierras. Ambos se enamoran y su relación les hace muy felices, hasta que estalla la Primera Guerra Mundial y Marcus decide alistarse.
Brian no quiere que Marcus vaya a una muerte segura por lo que tratará de impedirlo con todas sus fuerzas. El día que Briand se entera que su prometido acaba de embarcar en el buque que lo llevara hacía Inglaterra, será el día que todo lo cambie.
Briand al enterarse por el hermano de Marcus que ha zarpado recientemente, quiere detenerlo y corre tras él, perro en su descabellada carrera choca contra un enorme tejo.
Al despertar, nada es igual: lo primero que ve es una mujer vestida con unos extraños ropajes. Está en otra época, en plena dominación romana, y los habitantes de la región lucha contra los embates del todopoderoso imperio. La vida de la joven da un vuelco inimaginable: nuevas costumbres, aventuras sin fin y la presencia arrolladora del joven guerrero Kastan, que hace replantearse sus sentimientos hacia Marcus.
¿Logrará Briand regresar a sus mundo y su tiempo? ¿O se quedará para siempre a vivir entre los celtas? ¿Y a quién entregará finalmente su amor?

Mi valoración personal:
La guardiana del tejo era la novedad de la editorial Libros de Seda que más ganas tenía de leer. El que me siga los pasos desde hace tiempo, sabe que mi género favorito es la novela histórica, pero además si la novela en cuestión está aderezada con viajes en el tiempo y romane es sin duda una apuesta segura. Con esta premisa me adentré a conocer la historia de Briand, una muchacha que regresa a la casa familiar en Santander para reencontrarse con sus raíces. 
Las novelas que están desarrolladas en dos tiempos me gustan y La guardián del tejo cumple a la perfección los dos entornos en los que se desarrolla, la Cantabria de principios del Siglo XX y la de 30 a.C pudiendo ver que tan diferentes eran en costumbres y que supone ese cambio para Briand.
Con una narración ágil y sencilla, Judit nos presenta a unos personajes y una trama de la que te enganchas desde la página uno. Una historia de magia, de dioses ancestrales y de amor en las dos épocas. 
Pero no todo me ha gustado de la novela. Si bien es cierto que la historia central me ha encantado, he echado en falta muchísima información tanto de los personajes que Briand ha dejado atrás como con los que convive en el pasado. Información creo que relevante para entender el viaje al pasado queda como muy a la “imaginación del lector” y eso hace que algunas partes no consigas encajarlas bien.
En cuanto al final de la novela he de decir que deseo que tenga una segunda parte que consiga cerrar más la historia que bajo mi punto de vista a quedado demasiado abierta. No sabemos nada de Marcus y no sabemos casi nada del pasado de Kastan. 

En conclusión, La guardiana del tejo ha sido un libro entretenido que te mantiene enganchada a sus páginas, pero espero que podamos seguir disfrutando más sobre esta historia, ya que la sensación que me deja es de estar inacabada ya que aún tenemos que saber mucho más de Briand y Kastan.