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Aquí les traigo mi opinión sobre “La guardiana del tejo” de Judit Fernández, una novela de romance histórico con toques de fantasía. La historia nos sitúa en 1913, Briand es una joven inglesa con raíces españolas. Emprende un viaje a Cantabria para afincarse en la tierra de su madre y así comenzar una nueva vida. Allí conocerá el amor pero, al estallido de la Primera Guerra Mundial, Briand choca contra un enorme tejo, y de pronto, todo es distinto. Se despierta en otra época, rodeada de personas extrañas. Sin comprender lo que está pasando, la joven tendrá que adaptarse a las costumbres de la tribu celta que la acoge, a la vez que conoce a Kastan, un joven guerrero que le despierta sentimientos que no había sentido anteriormente. Como puntos fuertes de la novela, nos encontramos con la ambientación, sobre todo la parte del pasado, situada en el año 30 a.C. Creo que la autora ha hecho trabajo de documentación sobre las tribus celtas de Cantabria; simbología, gastronomía, ropas, actividades, jerarquía y papel de la mujer y el hombre dentro de la tribu. Ha sido especialmente interesante conocer y adentrarse en la historia por medio de una ambientación tan rica en detalles, muy cuidada y llena de leyendas, como el precioso relato de por qué el tejo es sagrado para ellos. Como puntos débiles, en mi opinión, ha sido la extensión de la novela y el desarrollo del romance. El libro cuenta con poco más 380 páginas y los protagonistas no se conocen hasta la mitad de la historia por lo que el romance se me hizo algo apresurado y no llegué a conectar con la pareja protagonista. Me habría gustado que fuera más largo y así poder empatizar mejor con los sentimientos de ambos. No obstante, dejando de lado ese detalle, ha sido entretenido e interesante. Lo recomiendo mucho si te gustan los viajes en el tiempo inesperados, donde la protagonista deberá enfrentarse y vivir fuera de su época y costumbres. |
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