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En esta novela se nos cuenta una historia en dos momentos temporales, el primero en 2001 y el segundo en 1933. En la fecha más actual se nos cuenta como una chica llega aun pueblo en busca de inspiración para escribir una novela y acaba encontrando un cuaderno misterioso, en ese momento una señora se ofrece a contarle la historia de la dueña de ese objeto. Es entonces cuando la narración salta a 1933, donde conocemos una versión más joven de esta mujer y la misteriosa dueña del cuaderno, la cual firma todos sus textos con E.C. En un principio parece una premisa sencilla, pero quizás ese el encanto de esta historia. Siempre se cuentan historias de pueblos sobre sucesos extraños, leyendas, gente que llega y se comporta de forma extraña... esa es la chipa de misterio que esconde este libro, pues a pesar de estar viviendo los sucesos desde un punto de vista cercano a la pieza central del puzle no sabemos exactamente que es lo que está ocurriendo. Algo se deja vislumbrar pero no es hasta el final cuando todo se conecta. En cuanto a los personajes, mucho gira en torno a Margaret (en la cual me hubiera gustado que se profundizara algo más) y Elin. La historia de Elin me conmovió, se podía sentir como su estado mental no era el mejor del mundo y como necesitaba el contacto y la compañía de alguien, la soledad es un arma muy cruel. Sin duda no pude evitar empatizar con ella y su perrita Kin, la cual me robó el corazón. Espero que os animéis con ella, es una buena historia para descansar entre lecturas densas. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |
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