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𝐔𝐧𝐚 𝐝𝐞 𝐦𝐢𝐬 𝐬𝐨𝐫𝐩𝐫𝐞𝐬𝐚𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐦𝐞𝐬. Lo leí por la recomendación de una de mis Winchis favoritas y lo cierto es que no me ha defraudado nada, como todo lo que ella nos recomienda. Se trata de una novela de terror psicológico que te va calando en los huesos sin que te des cuenta, hasta que todo explota y te pilla en medio de una terrible tormenta. 𝐔𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐜𝐨𝐬𝐭𝐮𝐦𝐛𝐫𝐢𝐬𝐭𝐚, 𝐥𝐥𝐞𝐧𝐚 𝐝𝐞 𝐡𝐮𝐦𝐨𝐫 𝐧𝐞𝐠𝐫𝐨 𝐲 𝐩𝐞𝐧𝐬𝐚𝐦𝐢𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐨𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢𝐯𝐨𝐬 𝐩𝐨𝐫 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐞 𝐝𝐞 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 𝐩𝐫𝐨𝐭𝐚𝐠𝐨𝐧𝐢𝐬𝐭𝐚. Llega alguna que otra ocasión en la que ya no sabes lo que es real y lo que no. Todo parece estar en la mente de la protagonista, pero como lo vemos desde su perspectiva, pues no nos queda más remedio que dudar o creerla. 𝐂𝐨𝐧𝐭𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐜𝐨𝐧 𝐮𝐧𝐚 𝐩𝐫𝐨𝐭𝐚𝐠𝐨𝐧𝐢𝐬𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐧 𝐧𝐢𝐧𝐠𝐮́𝐧 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐟𝐢𝐚𝐫 y eso juega con nuestra mente. Considero que es uno de los puntos más fuertes del libro. La narración es maravillosa, con una exquisitez que hace que te bebas la novela sin poder contenerte, me ha recordado mucho al más puro estilo de 𝐒𝐡𝐢𝐫𝐥𝐞𝐲 𝐣𝐚𝐜𝐤𝐬𝐨𝐧, perfecto en cuanto a descripciones y con una aura siniestra que baña todo a su vez. Poco a poco, se te irá sumiendo en un estado 𝐩𝐞𝐫𝐭𝐮𝐫𝐛𝐚𝐝𝐨𝐫 en el que ya no te fiarás ni de tu sombra. Y no puedo dejarme en el tintero hablar sobre como 𝐫𝐢𝐝𝐢𝐜𝐮𝐥𝐢𝐳𝐚 𝐥𝐚 𝐬𝐨𝐜𝐢𝐞𝐝𝐚𝐝 𝐧𝐞𝐨𝐲𝐨𝐫𝐪𝐮𝐢𝐧𝐚 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐞́𝐩𝐨𝐜𝐚, con un humor negro muy rimbombante y casi surrealista en algunas de las ocasiones, sobre todo por los comentarios que se sueltan de buenas a primeras. 𝐀 𝐦𝐢 𝐦𝐞 𝐡𝐚 𝐯𝐨𝐥𝐚𝐝𝐨 𝐥𝐚 𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐞𝐧 𝐦𝐮𝐜𝐡𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐬𝐞𝐧𝐭𝐢𝐝𝐨𝐬, no es que lo que sucede al final no me lo hubiese esperado, porque creo que a mitad de libro se puede comenzar a ver por donde van los tiros, pero sin duda, merece mucho la pena continuarlo hasta el final. 𝐒𝐢 𝐨𝐬 𝐠𝐮𝐬𝐭𝐚𝐧 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐭𝐢𝐩𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐢𝐛𝐫𝐨𝐬, 𝐧𝐨 𝐩𝐨𝐝𝐞́𝐢𝐬 𝐝𝐞𝐣𝐚𝐫𝐥𝐨 𝐩𝐚𝐬𝐚𝐫. |
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