Nadie contará la verdad

Se trata de una novela sobre corrupción en la que los hilos los mueven personas muy poderosas: empresarios, banqueros, políticos,...ya os podéis hacer una idea de qué va esta historia. Personajes sin escrúpulos que están dispuestos a todo con tal de no perder ni un ápice de poder.

Veamos lo que me ha parecido. Este tipo de historias no me terminan de gustar. Me pierdo fácilmente entre los entresijos de unas decisiones que normalmente no llego a entender. Soy así de simple, qué le voy a hacer. Así que me costó entrar en la novela y llegué a pensar que no era para mí y que no pasaba nada si la abandonaba. Pero algo en ella me animaba a seguir, me iba arrastrando y al final terminé enganchada sin remedio.

Y es que la historia te atrapa. Y te atrapa también la manera de narrar de Pedro Feijoo, autor del que ya había leído un par de novelas anteriores. Tras una primera parte un tanto farragosa para mí como ya os he dicho, de pronto empezaron a salir hilos de los que ir tirando y me vi queriendo desenredar el ovillo a toda velocidad. Y he disfrutado con el juego.

Y para terminar de atar cabos un epílogo magistral. Un final que pone la guinda a toda esta trama de corrupción y de hechos deplorables. Un final a la altura.

Vamos, una lectura que recomiendo sin lugar a dudas por todo lo que te hace sentir y porque habrá personajes que te van a robar el corazón. (Y otros con los que blasfemarás).

¿Se atreverá alguien a contar la verdad?