En esta historia, Tino hijo de dos “locos” seguidores de Ovnis e historias interespaciales, transita la grave enfermedad de su madre durante sus visitas al hospital mientras va descubriendo la llegada a la adolescencia. Es un relato íntimo, de descubrimiento y dolor, de pequeños placeres ocultos y transgresores. Probablemente no sean necesarias algunas situaciones para reforzar el vínculo de Tino con su sexo, creo que ello incluso ponen un obstáculo al lector que impide seguir la prosa con naturalidad. Una historia bien contada, pero con excesos innecesarios. |