Pues más que interesante novela de iniciación protagonizada por Tino, un niño de 11 años, y que se desarrolla en tres escenarios complementarios (el hospital en el que permanece ingresada su madre, la casa en la que convive con un padre ausente obsesionado con los OVNIS y la escuela). Tres escenarios en los que tiene lugar el final de la infancia con un triple descubrimiento: la sexualidad, la muerte y el dolor. En el lado más positivo del libro, además del estilo sobrio y minimalista del autor, destaca el manejo que este realiza de los símbolos. En especial, cabe mencionar el encuentro con una perra y sus cachorros del capítulo III y ciertas imágenes del capítulo final que no desvelaré para no destripar la trama. En lo menos positivo, quizá alguna de las historias secundarias, que podrían haber tenido un mayor desarrollo y haber dado lugar a una novela tal vez más completa. Aún así, impresión más que favorable la de este libro y este autor, a quien es mas que probable que vuelva en un futuro. |