Encontrarás quimeras: Novela de fantasía juvenil

De quimera a quimera
Taniel es un muchacho más en la ciudad de Gorna. Tiene sus problemas con los estudios, una amiga especial y es karenita. de este modo, vive apaciblemente con su abuela y su padre que lo animan a ser un gran político, a pesar de que a él le gustaría enseñar. Sin embargo, un día todo cambia, una prueba de retórica y la aparición de una marca en el suelo cambiarán su percepción del mundo.
Este es el planteamiento de la historia que nos presenta Ana Escudero. En ella encontraremos el desarrollo de la vida de Taniel, un muchacho que, en su formación y gracias a la perspectiva que le ofrece su amiga Judit, comenzará a plantearse los pilares más importantes del mundo que le rodea. Así, la historia nos llevará a conocer cómo es la religión en la que vive Taniel, cómo es el sistema político o qué pecados cometió la humanidad para que los dioses les castigaran con las quimeras.
En este sentido, la novela juega, a nivel de trama, muy bien con la polisemia de la palabra quimera, ya que no será solo el animal mitológico quien ponga a Gorna en jaque, que de hecho está habitando el circo de la ciudad, sino también las disputas retóricas entre sus habitantes que les llevará a defender cosas como ciertas cuando realmente no lo son.
Justo será esto lo que en dos ocasiones, a lo largo de la novela, motive a nuestro protagonista a cambiar el rumbo de subida: una venganza y el ofrecer justicia a los agraviados.
Ambientación y ambiente
Para que toda la historia pudiera desarrollarse en su temática central: la búsqueda de cierta verdad última que dé sentido a nuestra existencia, no había mejor escenario que la Grecia clásica. O al menos, una inspiración en ella. Así podremos contemplar la vida escolar, el mercado y la influencia de la polis. En este sentido la novela me ha gustado porque todo estaba muy bien cohesionado, incluso cuando Taniel viaja fuera de su ciudad. Además, ha conseguido que dentro de esa ambientación, la mitología pueda convivir con esa cotidianidad que comentábamos más arriba, cosa que no siempre se consigue.
La verdad como meta
Lo cierto es que la novela me ha sorprendido por su temática. No pensaba que la cuestión de la fe, en qué tenemos fe, cómo podemos llegar al conocimiento de la verdad, cómo el acomodo de los emisarios religiosos puede llevar al descreimiento de los fieles, etc., fuera a tener tanto peso en la novela. Sin embargo, la exposición de Ana me ha parecido sublime y racional.
Tomando los tres focos posibles: la creencia, el ateísmo y la creencia en otra cosa, ha conseguido que entendamos todos los puntos de vista. Es cierto que la religión imperante parece que siempre tiene las de ganar, pero el sincretismo y la creencia en valores más que en entidades siempre ganan la partida. Y, sin embargo, la autora consigue que pensemos en el porqué de las cosas:
«No hay dios que pueda cambiar el mundo si nosotros no colaboramos»
Es cierto que más allá de lo que nosotros pensemos, lo que es cierto es que la búsqueda de la verdad es un anhelo que tenemos todos y, en este sentido, o actuamos o no sucede nada.
La clave está en la representación
No obstante, es verdad que cada uno tenemos nuestras propias convicciones, pero es cierto que la novela, aun con este planteamiento, hace que te sientas incluido.
En mi caso, me identifico con Judit (en toda la totalidad del libro). La mejor amiga de Taniel será una muchacha que podríamos identificar como atea, aunque realmente lo que hace es cuestionarse todo, intentar ver el mundo siempre con ojos nuevos.
Frente a ella, Taniel, nuestro protagonista, será karenita, creerá en la protección de los dioses, pero ello no le impedirá ser crítico, reflexionar y tomar en consideración otras posibilidades. Esto será lo que le lleve a vivir su gran aventura, a plantearse cuál es la verdadera función de la quimera y a conocer su pasado en su totalidad.
Destruirás quimeras
La verdad es que me ha gustado bastante la novela para lo cortita que es. Podríamos pensar con este planteamiento que podríamos necesitar un planteamiento más amplio, pero Ana consigue concretar todo esto en muy poco espacio ofreciéndonos la información crucial para seguir su trama. Además, tenemos que agregar que su prosa es muy fácil de seguir (incluso en las discusiones retóricas, que las hay) y que nos invita, también, a continuar leyéndola. En definitiva, una historia muy interesante y entretenida que no os dejará indiferentes. Espero que os animéis con ella.

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