La mujer que hablaba sola

Una novela colombiana que cuenta los monólogos de una mujer que habla con su esposo muerto contándole los sucesos de su vida, acaecidos en su juventud, en la época en que se casaron y cuando a él lo mataron y lo que posteriormente vivió criando a su hijo, quien después se ve envuelto en un situación de terrorismo que sucedió en Bogotá a inicios de la segunda década del siglo XXI. Sin embargo, eso podría solo ser una crónica periodística o la vida de una mujer y sus circunstancias. Pero lo que hace rica la obra es cómo la narración de estos hechos sirve para realizar una crítica a la sociedad colombiana acostumbrada en estos momentos a polarizarse entre derechas e izquierdas, que al final son lo mismo; creyéndole a medios de comunicación que manipulan la verdad; viviendo insensibles a lo que le pasa a los otros hasta que nos pasa en carne propia; y manteniendo el machismo a ultranza en el cual la mujer no vale y donde ella es principalmente la victima de la violencia y quien la sufre más fuertemente.
Por otro lado, hay en este libro una lección de empoderamiento femenino muy interesante, a través de la historia de Cecilia, el personaje principal, la lectora puede revisar sus propias decisiones, las que ha tomado y las que han tomado por ella. Un darse cuenta del valor que realmente tienen como hijas, como madres, como esposas, como viudas, como amigas, como amantes, como hermanas, como mujeres, en una sociedad que no las ha valorado y en la cual ellas mismas no han aprendido a valorarse.
Recomendaría este libro para mujeres que quieran reflexionar más sobre el valor que tienen, sobre su libertad, sobre sus derechos, sobre su poder y sobre el poder de sus decisiones.