Monólogos de la vagina

"Vagina. Ya está, ya lo he dicho. Vagina. Lo he dicho otra vez. Llevo repitiendo esta palabra una y otra vez los últimos tres años. La digo porque se supone que no debo decirla." Así comienza 'Monólogos de la vagina' y enseguida capta mi atención. Porque confieso que cuando el libro llega a mis manos, pienso que tiene un título demasiado atrevido, con la palabra "Vagina" estampada en su portada. Pero en cuanto empiezo a leer, quedo prendada de la voz de Ensler y vengo ahora con esta reseña a deciros clara y llanamente: hay que decir vagina.

Eve Ensler recopila en este increíble manual del cuerpo femenino todo un aluvión de testimonios de mujeres de todas partes, razas y edades que hablan sobre la vagina, la sexualidad y, en definitiva, de ser mujer en esta sociedad heteropatriarcal. Son textos ambiciosos, atrevidos, sorprendentes y más que íntimos, donde la mayoría de las mujeres cuentan sus peripecias para conocer la sexualidad en épocas en que estaba prohibida o no era de buenas señoritas, hablan de la mutilación genital femenina, de violaciones, de masturbaciones o, simplemente, del desconocimiento que muchas tenemos siendo niñas de nuestros cuerpos porque así nos han enseñado.
Sin duda, 'Monólogos de la vagina' me ha parecido un libro sensacional, interesantísimo y muy educativo, pero ante todo muy necesario. Ensler plasma todo tipo de vivencias, confesiones y y recuerdos de mujeres que han vivido la censura y la educación machista de su época, así como nos relata el inicio de su gran travesía a favor de la libertad sexual de la mujer, e incluso nos da datos tan interesantes a la par que escalofriantes, como que existe la clitoriectomía, y que se practicaba en la antigüedad si había alguna joven indecorosa que aprendía a masturbarse. Además de varias vivencias que te dejan helada, como de las mujeres de placer o las niñas que sufren la ablación, encontramos más de un reconfortante texto sobre el empoderamiento femenino que deberíamos leer todas y todos.
Desde luego, he disfrutado y he aprendido muchísimo, me han impactado ciertos hechos y me ha horrorizado incluso la represión psicológica que han sufrido nuestras antepasadas simplemente por no poder decir vagina, una palabra tan nuestra y tan normal, pero que a día de hoy sigue siendo neutralizada, porque así lo quiere el patriarcado. 'Monólogos de la vagina' me ha encantado y ahora no me da miedo decir vagina.

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