Supersaurio

He aquí los productos en oferta del día:

- Un brick de crítica a la sobreexplotación que sufre una isla en pro del turismo.
- Un pack de precarias condiciones para jóvenes sobrecualificad@s que, con suerte, empiezan su andadura laboral.
- Un bote de sistema hipócrita donde el ser humano se acaba doblegando ante el dinero.
- Medio kilo de incómodas situaciones e invasiones que debemos sufrir las mujeres en multitud de ocasiones.
- Una botella de pequeñas dificultades y preocupaciones a las que hace frente una generación.

Meryem ha escrito un libro soberbio, reivindicativo y muy bien contado, con una adecuada dosis de humor y un estilo desenfadado que atrapa por completo. Leer sus páginas, es asistir al que podría ser el diario de cualquier joven nacid@ en los 90.

La autora toca muchos temas importantes, a veces en pequeñas pildoritas, otras zambulléndose a lo grande. Temas que aún son susceptibles de análisis, debate y mejora en nuestra sociedad, y lo hace tan bien.

A todo ello se suma el placer de leer una novela ambientada en mi isla, y reconocer muchas de las cuestiones de las que habla Meryem, siendo algunas, asuntos que sin duda deben ser expuestos a viva voz, como es en este caso el maltrato que ha recibido una parte de la isla articulada para responder al negocio del turismo, incluso suponiendo eso la total pérdida de identidad y naturaleza propia.
También he de decir que Canarias ofrece muchas cosas hermosas en las que en este caso no se hace mucho hincapié, y quizá lo he echado un poquito en falta, pero entiendo que no sería acorde al objetivo de la novela.

Y esa voz en este caso es fresca, directa y capaz de llegar a todas las generaciones, y creo que es aquí donde reside el éxito de Supersaurio, que a pesar de retratar las inquietudes de una generación concreta, desentraña lo insustancial y demencial de muchos sistemas empresariales y las preocupaciones o presiones de cualquier persona que no termina de responder al rol y estatus que a su edad se le presupone.

En definitiva, ha sido una lectura magnífica y un descubrimiento brutal. Estoy deseando volver a leer a Meryem.