La estudiante de Historia

Hoy os traigo la reseña de esta colaboración con @rocaeditorial, a quien agradezco mucho el envío del ejemplar.
En este nuevo libro de la autora, su tercero, la historia vuelve a girar en torno al monte Blackåsen, elemento común con sus dos anteriores novelas, pero que nada tienen que ver, ni por momento histórico ni por argumento.
El libro transcurre en Estocolmo, en plena 2ª guerra mundial, con la aparición del cadaver torturado de Britta, una estudiante lapona de historia. Este será el punto de partida para que Laura, su mejor amiga de la facultad, comience a investigar quién o quiénes están detrás de su muerte y las razones para matarla.
El libro se mete de lleno en la 2ª guerra mundial y las posturas que tomaron los países nórdicos frente a Alemania y Rusia, sobre todo Suecia. Hay mucha documentación detrás, muchos de los personajes y hechos que narra son reales aunque la autora se permite tomar ciertas licencias a la hora de montar la historia. También nos da a conocer al pueblo sami, que habita en Laponia.
El libro me ha dejado una sensación agridulce. Me ha gustado, pero ha habido momentos que me ha costado entrar en la historia, sobre todo el primer tercio. Una vez que lo pasas y te haces con los personajes, el libro se lee muy bien, sobre todo las 150 últimas páginas donde ya coge ritmo.
No puedo achacarle nada a la autora porque para contar esta historia son necesarios esos personajes, ni más, ni menos. La profundidad y complejidad de la trama lo requiere.
Es un libro que recomiendo a todos aquellos a los que les guste lo relacionado con la 2ª Guerra Mundial, los thrillers políticos y los libros de espías.
Si buscas una lectura ligera, no es tu libro.