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Lo primero que debo mencionar es que hay que leer la primera parte, ya que si no habrá sucesos y personajes que no sabrás de dónde vienen y no entenderás su contexto. Seguiremos con nuestra historia de amor principal con Chari y Carlos, aparte de las que ya teníamos en el primer libro y otras que se irán formando. Conoceremos a la hija de Carlos, que se llama Abril, una criatura de cuatro años muy salada y con un secreto que Chari descubrirá. En este libro continuamos también con mucho erotismo y sexo en muchos de los capítulos, pero no tanto como el libro anterior. Es una historia entretenida, con espíritus, ángeles, realidad y fantasía. El libro no se hace para nada pesado, tiene una escritura muy ligera que ayuda a su lectura. El final me habría gustado un poco más largo, ya que en pocas páginas pasan muchos años muy rápido y me quedo con las ganas de enterarme de más cosas y con más pausa. |
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