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El novelista Jean Echenoz realiza un retrato del que fuera su editor Jérôme Lindon, sin acritud narra las peculiaridades de un editor que no trabajaba los textos con el escritor, salvo los títulos que siempre quería cambiar, su forma de comportarse con él, sus consejos que solo desaconsejan hacer tal o cual cosa, su afición al cine vespertino de los domingos, su negativa a dar anticipos al editar una novela, las comas como "la única divergencia estética entre nosotros"... Estamos, en defintiva, ante el retrato amable de un hombre con dos sonrisas escrito en junio de 2001 y que felizmente ha recuperado Nórdica Libros en una espléndida edición de bolsillo.
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