Santos crueles: Algo oscuro y sagrado, 1

Hola, espero que estéis bien, a nosotros en Granada nos han cerrado todo menos los negocios esenciales, ojalá que esto vaya a mejor y no a peor, creo que ya está bien. Yo vengo a hablaros de lo que ha sido mi lectura estos días, nos recomiendan quedarnos en casa, y yo sé aprovecharlo bien con buenas lecturas. Desde que la editorial nos anunciaba por las redes que publicaría esta novela en español no he dejado de pensar en la historia, desde luego que mis expectativas estaban altas, y para mí no me ha decepcionado, me ha gustado bastante.

Es la primera vez que leo a la autora, es su primer libro y me ha sorprendido mucho su narrativa, me esperaría algo un poco más inmaduro, pero me ha gustado y me ha conseguido atrapar. Estamos ante un mundo inventado, donde la guerra lleva un siglo perpetuándose, un país hecho y consagrado a los dioses, y otro que los repudian y no creen en su poder, sino en el de los magos de sangre de su propio pueblo. La novela comienza de forma abrupta, Nadya está en su santuario, donde se ha criado y es donde nació, no conoce otra vida, pero es de las pocas personas que pueden oír a los dioses, ella es más especial todavía ya que escucha a todos los dioses, y les concede su poder. El comienzo del libro como os digo es algo abrupto porque ya empieza la acción sin darnos apenas explicaciones, la iremos conociendo de poco a poco con la huida de Nadya. Así que al principio me sentí algo perdida en muchos sentidos, tanto en la trama, como en el mundo creado por ella y los conceptos de dioses, pero en lo que más en los nombres, está basado en países eslavos, lo que los nombres de dioses y de los personajes son eslavos, algo que me costó un poco ubicarme.

Lo bueno es que según avanzaba en la novela pude no solo hacerme bien con los nombres, algo que agradezco a la autora es que no tengamos muchos personajes que me confundieran aún más, sino que tanto la trama y este mundo se me hacía más nítido y sobre todo más comprensible, lo que hizo que me enganchara sin remedio. La narrativa de la autora me ha ayudado en muchos sentidos, las descripciones no son pesadas, y no saturan, desde luego que a mí no me faltó nada, creo que la autora nos da lo justo para adentrarnos en un comienzo de trilogía sin llegar a ser completamente introductorio, nos deja con ganas de conocer más al final de la novela, más de este mundo, más de los personajes y sobre todo más de una trama que se queda muy interesante. La autora también nos da mucha acción, me hacía falta un libro que me enganchara que fuera de fantasía y que me diera algo nuevo, algo que me sorprendiera. En este punto tengo que comentar que al principio la novela me recordaba muchísimo a la trilogía Grisha, pero no es una copia ni mucho menos, la autora sabe cómo hacer de la historia algo único y original, solo que se nota que tiene reminiscencias y que le gustaba la trilogía, de hecho una de sus mentoras ha sido la misma Leigh Bardugo.

La ambientación me ha resultado algo sencilla por culpa del principio, pero que por lo menos a mí me ha gustado, me deja con muchas ganas de conocer algo más de todo este mundo. Lo que me ha pasado es que no he conseguido poder ver más allá de unos pocos paisajes de solo uno de los reinos, en eso no nos ilustra mucho la autora, te deja la sensación de querer más, de conocer más de cómo es todo este mundo. Tendremos un mapa al comienzo de la novela, algo que me ha servido de mucha ayuda cuando los personajes nos comentaban de uno y otro país. Además la autora en muchas ocasiones no nos comenta nombres, nos comenta su nacionalidad, lo que sin duda hace que tuviera que estar yendo al mapa, pero eso me pasó solo al comienzo, no tenemos muchos reinos como para perderse tanto. Lo que si tengo que comentar es que la autora es muy gráfica a la hora de describir sangre, ya que los magos utilizan la magia con sangre, tienen que cortar su carne con cuchillos, a mí no me molestó la verdad, creo que hay más en otros libros, pero prefiero avisar por si acaso.

Los personajes me han gustado bastante, tendremos dos protagonistas principales, uno de ellos es Nadya que ya os he contado de ella, puede hablar con todos los dioses y que le otorguen su poder. Nadya es un personaje que va evolucionando, no nos dará conflictos de si está o no haciendo algo lícito, aunque de cara al final nos dará más de un quebradero de cabeza, pero no por culpa de ella. El libro está narrado a dos voces en tercera persona, pasaremos de un personaje a otro, al principio pensaremos que uno es el malo, el otro el bueno, pero nuestra perspectiva irá cambiando con el paso de las hojas, por supuesto no diré en qué aspecto. Serefin es el otro protagonista, es el gran príncipe y heredero al trono del reino en guerra con el que se enfrenta el de Nadya, por lo que tendremos las dos perspectivas,. Tendremos personajes secundarios que irán cogiendo protagonismo a lo largo de la trama, mi favorito es Malachiasz (Ahora me comprendéis el lío de nombres), es un personaje que esconde muchos secretos, que se nos van revelando, aunque a mí más de uno de me dejó con la boca abierta. Tendremos también trama de romance, tiene un gran peso en la trama, pero qué queréis que os diga, a mí me ha encantado, además es importante para cosas que pasan al final de la novela.

En general me ha gustado mucho, pese a un comienzo algo abrupto en el que me sentía algo perdida la autora ha sabido ganarme, con una trama que me ha enganchado, personajes que he conseguido llegar a coger cariño, y un final que deja un regusto en la boca de querer saber mucho más, espero con muchas ganas la segunda parte.
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