Creo que es mejor entrar en este libro sin saber casi nada al respecto. El comienzo fue increíble, estaba emocionada y luego las cosas se fueron cuesta abajo. La historia seguía dando vueltas, lo necesitaba para avanzar. No he dejado el libro porque tenía curiosidad de cómo iba a terminar. Conocemos a una pareja que lo tiene todo: una hermosa casa, excelentes trabajos y dos hijos. Cenan exactamente a la misma hora todas las noches, todo orgánico y sin teléfonos permitidos. Cada semana tienen al menos una noche de cine y los niños participan en deportes. Su vida es perfecta. Pero después de estar juntos durante tanto tiempo, han comenzado a sentir la necesidad de darle vida a su relación. Y así comienzan a secuestrar y asesinar mujeres juntos. El esposo, que permanece sin nombre a lo largo de la historia, está completamente dedicado a su esposa Millicent y su familia. Realmente disfruté la cantidad de espacio que ocupaba el aspecto familiar y que los niños estuvieran tan involucrados en la historia, ya que esto solo se sumaba a lo espeluznante de todo. El choque entre la forma en que la pareja se las arregló para matar personas y el amor con el que cuidaron a los niños fue a la vez horrible y convincente, y definitivamente aumentó las apuestas. ¿Cómo afectarían las eventuales consecuencias de sus acciones a sus hijos inocentes? Realmente disfruté cómo se tomó en consideración este aspecto. al principio no tenía idea de hacia dónde estaba llevando la historia, pero pronto comencé a sospechar que había algo que simplemente no estaba bien, además del asesinato, por supuesto. Dicho esto, la revelación realmente no fue tan sorprendente para mí, e incluso predije exactamente cómo terminaría, pero aún así la encontré muy satisfactoria ya que se ejecutó muy bien. Es una lectura bastante amena.
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