Encontrar una novela gráfica para niños que de visibilidad al TEA es todo un regalo. El mundo de Frankie me ha parecido una novela educativa, 100% inclusiva y bastante divertida. Creo que puede ayudar a muchos niños y niñas a aceptarse como son y a aceptar a los demás entendiendo que, a pesar de aquellas cosas que nos hacen diferentes, todos somos iguales. El diseño del libro está perfectamente cuidado, me encanta la paleta de colores que utiliza la autora y la carga de significado que esta tiene. Las ilustraciones son simples pero tienen algo que atrapa y hacen que la lectura sea fluida. Me ha encantado descubrir a posteriori la historia de la autora que tiene mucho que ver con la historia de Frankie. Admiro mucho a las personas que, tras pasarlo mal, deciden ayudar a los demás visibilizando realidades que afectan a tantos niños y niñas. Creo que el camino hacia la verdadera inclusión va en esta dirección. Recomiendo totalmente el libro para regalar a los peques de la casa a partir de los 10 años. Disfrutarán la lectura sin duda y será una oportunidad fantástica para que aprendan el valor de la amistad. |