Justicia

Otra novela revelación para este año. Una novela fluida que no tiene grandes giros ni un ritmo trepidante, pero que no deja de llamar la atención del lector. Me ha encantado esta forma de narrar de forma elegante y pausada, aportando pequeños datos y hechos que te hacen ir leyendo sin parar y que al finalizar la novela te dejan “boquiabierto”.

Si un autor logra que durante 450 páginas sientas la lluvia de Bilbao, eso es crear la sensación de presencia en el lector. En esta novela la ambientación es una de las mejores cosas de esta novela. Cómo sientes que estás caminando por sus calles, con una descripción absoluta de los barrios marginales que no conocemos tanto. El lenguaje es soberbio hasta casi poético.

Una novela compleja, que te despista mucho y que no llegas a entender hasta que avanza la trama. Quizás tiene muchas descripciones y alarga en algún momento la trama de cada personaje, pero encuentro que son todas absolutamente necesarias para encajar la historia y poder hacer ese cambio de acción.

Me ha encantado la figura del testigo, Osmary un ex militar cubano retirado que ha venido a España a investigar la muerte de su hijo; se mostrará especialmente interesado en ayudar a resolver los crímenes, un personaje que para mí tiene todo el peso de una gran novela negra.

Una novela que no podéis dejar pasar si os gustan este tipo de tramas es muy entretenida y completa.