La verdad es que al principio me costó engancharme. Es el tipo de poesía que menos me llega, la que suelo llamar "metafórica" (no sé si tendrá algún nombre en realidad pero creo que se entiende), en la que a veces cuesta entender bien de qué está hablando el autor. Pero, ¿Saben qué? Me gustó bastante. A medida que avanzaba me iban envolviendo los sentimientos que el autor le confió a sus palabras. Los poemas son de esos que quizás no entendés qué quieren decir, pero entendés perfectamente qué quieren transmitir, el mensaje. Para el final me encontré avanzando muy rápido porque sentía que a cada poema que leía, más fuerza sus sentimientos tenían y transmitían. Es raro de explicar, no sé si me pasó antes. Pero me sentía como cuando estás llegando al climax de una pelea en una novela, y eso que cada poema iba de algo diferente. Este libro es muy cortito, pero en fin, lo disfruté, y me quedo con más de una frase. |