Una pequeña maravilla apta para niños lectores. La prosa atrapante del maestro Delibes ya es de por sí un motivo principal para adentrarse en esta novela, si a eso le sumamos su buen acierto en cómo lleva varias historias que llegan a ser más que domésticas a través de los ojos de un niño, no hay motivo para no conocer esta novela. Su merecido éxito viene además por el realismo de sus escenas y nudos, huyendo así de cualquier trama edulcorada, que de eso ya estamos todos bien servidos. |