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La novela cuenta con un preludio y tres libros (los cuales también están separados por capítulos) y un total de 450 páginas. El preludio es, en mi opinión difícil de leer, tal vez porque se trata de una parte importante de la historia que va tomando sentido según esta avanza, por lo que en un principio hace sentirse perdido al lector. Además, comienza a incorporar discusiones sobre la iglesia luterana y la católica romana (que, si como en mi caso no tienes recientes los conceptos de estas, hará que te sientas más perdido). El primer libro nos habla de la familia salcedo, más concretamente de nacimiento del protagonista, Cipriano Salcedo, y el rumbo de la historia después de este. Que rechazado por su padre termina en un colegio de niños huérfanos. En el segundo libro, sin embargo, nos habla de la edad adulta de Cipriano y de su matrimonio, más o menos acertado. También aquí comenzaremos a ver la reforma religiosa que sufrió la España de esa época y comenzaremos a entender un poco mejor el concepto de herejía e incluso el origen de las sectas. Finalmente, en el tercer libro titulado “el auto de fe” (del cual no voy a desvelar demasiado por no hacer un spoiler gigante) es donde veremos a la inquisición en todo su esplendor. En conjunto el libro me ha gustado. Sobre todo, como no, el último libro que es donde se esclarece todo y entra la acción. He de admitir que algunas partes del libro se me han hecho un poco pesadas, no pudiendo leer más de un capítulo de seguido. Además, mi edición cuenta con hasta 1581 aclaraciones a pie de página por lo que puede que eso haya hecho la lectura un pelín más pesada. |
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