Aunque al principio me costó engancharme a la trama y la voz narrativa no es la habitual, una vez dentro, no pude salir hasta el final. Lo que más destaco de “La mujer perfecta” es su originalidad y los diversos giros en la trama inesperados en un mundo de robots que pueden aparentar ser tan reales como un humano, y en el que se denuncia el machismo y se trata el tema del autismo, en este caso de Danny, el hijo de Abbie y Tim, nuestros protagonistas. En pocas ocasiones logras empatizar con los personajes, pero eso no desmerece a una trama bien ingeniada con un final inesperado. ¿Dónde está Abbie “la real”? Se me ha hecho un poco largo, eso sí, y hay partes un poco pesadas, pero lo he disfrutado bastante. |