Ya en vida, la figura del poeta Jaime Gil de Biedma (1929-1990) estuvo envuelta por un halo de leyenda. Vástago de una familia vinculada a la aristocracia castellana, trabajó como alto ejecutivo en la Compañía de Tabacos de Filipinas.
Es un cuerpo creado a partir de la unión de distintas partes de cadáveres diseccionados, escrito por Mary Shelley a partir del reto literario de Lord Byron.