Érase un corazón roto es un libro cortito donde predomina la poesía, pero también tiene fragmentos de prosa poética y una serie de microcuentos al final. En primer lugar, me ha encantado la edición tanto por fuera como por dentro, con una frases preciosas con cambios de color y letra. En cuanto al contenido, el autor divide el poemario en tres partes: Desamor, Amor y Motivación. En la parte de «Desamor» encontramos poemas que transmiten un sentimiento de dolor y de vacío, de sueños incumplidos y de decepciones. En «Amor» los poemas hablan de ilusión, de nervios, de esa complicidad y esa perfección que apreciamos en la otra persona cuando nos enamoramos. La parte de «Motivación» es la que más me ha gustado. El autor habla de la importancia de quererse a uno mismo, de luchar por los propios sueños y de vivir la vida sin que nos importe lo que diga o piense el resto. En definitiva, es un libro cortito y que se lee rápido, con unos poemas y relatos con los que quien más y quien menos se sentirá identificado. Merece la pena leerlo, independientemente de si soléis leer poesía o no. |