La historia es potente, llena de matices interesantes. Un secuestro de ETA en sus últimos días, la reacción de una esposa desesperada, niños que lo pasan mal en el colegio por culpa de compañeros abusones… Pero en cambio su prosa, que en absoluto es mala, a mí no me acabó de enganchar. Para mi gusto le falta algo, no sabría definir bien el qué. |