Confesiones de una criada

En primer lugar, dar las gracias a Edición Anticipada por él envió del ejemplar.

Confesiones de una criada es una novela donde su protagonista Frannie nos ira desvelando su vida mientras esperan que la lleven a la horca.

Frannie es una criada mulata acusada del asesinato en el Londres del siglo XlX. Pero también la de muchas mujeres que, a lo largo de muchas generaciones, tuvieron que luchar por encontrar su propia voz, en un mundo donde no querían escucharlas.

De sus personajes diré que son pocos y muy bien definidos. Destacaría de ellos a:

Frances:

Valiente, inteligente, luchadora y salvaje.

Benham:

Un ser cruel y despreciable.

Meg:

Una mujer muy sensible y débil.

Frannie Langton es una sirvienta mulata y bastarda, de origen jamaicano, que llega a Londres para ser entregada, casi como un regalo exótico, a un renombrado científico y su esposa.

Su vida comienza en una plantación llamada Paradise en las Indias Occidentales, donde experimenta el trato más horrible, cruel y brutal que un ser humano pueda soportar. Si todo eso os parece poco, también la obligaran a formar parte de los experimentos más crueles del propietario de la hacienda Paradise. También la enseñaran a leer, nada usual en las personas de su raza. Lo que hace que se convierta en una mulata única.

Frannie es un personaje muy peculiar, con el que a veces he llegado a empatizar, sobre todo a lo referente a su sufrimiento y a esas horribles experiencias que le ha tocado vivir.

Su vida en Londres para ser regalada como criada por su amo, su inteligencia e incluso su soberbia por querer ser independiente le harán a veces causarles algún que otro problema.

Siendo joven viaja a Londres, donde su amo la regalará a un importante científico y a su extravagante esposa francesa, con la que Frannie establece una relación muy especial. El matrimonio acabara siendo víctima de un terrible asesinato del que Frannie es la principal sospechosa.

La novela esta narrada a modo de confección por su protagonista, a su abogado, hace referencias a cosas que vivió y le hubiese gustado dejarlas en el olvido. Mientras espera en una celda a que sea ahorcada.

La prensa la cataloga ya como si fuese un monstruo y los prejuicios raciales de la época no la ayudan. Sólo le queda alzar su voz y contar las vivencias acaecidas en su vida, sus memorias, como única defensa, ya que la han condenado incluso antes de ser juzgada.

Es la primera novela de la autora, y me ha encantado como consigue incluso sembrar la duda sobre las declaraciones de la protagonista y crear en todo momento un halo de misterio e incertidumbre. También me ha gustado las descripciones de la época, incluidos los procedimientos judiciales, la lucha diaria de los esclavos y el destino que les esperaba e incluso las casas de mala reputación son excelentes.

Por poner un pero, diré que a veces se me hizo un poco lenta la novela en algunas partes y su final para mi gusto, fue un poco precipitado, dejando algunas cosas en el aire de las que me hubiese gustado saber más.

En definitiva, “Confesiones de una criada” es una historia muy dura. Bien escrita, con unos personajes bien desarrollados y una trama bien hilada. Donde habla de la esclavitud, de la hipocresía de una sociedad, que hablaba de abolicionismo, pero que no hacía nada por mejorar las condiciones de vida de los negros que eran traídos a Inglaterra en calidad de “criados”. También nos hablará de los terribles experimentos que hacían con ellos en las Indias Occidentales “en nombre de la ciencia”.

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