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Lo que más me ha gustado de esta historia es el found family, como Tommy, el protagonista, consigue encontrar su lugar en el mundo dentro del aquelarre disfuncional de brujas de Manhattan. Creo que prácticamente todos los personajes están muy bien construidos y, aunque a veces tengas ganas de darles un guantazo, les acabas cogiendo cariño. Además ha sido una lectura que no me ha resultado pesada, salvando quizás algunos momentos puntuales. La parte de fantasía, que realmente es por lo que escogí esta lectura, brilla prácticamente por su ausencia al principio del libro, centrándose más en presentar a los personajes y cómo van evolucionando sus relaciones. Aunque, hacia el final, está empieza a aparecer con más frecuencia y promete estar más presente, o al menos cuento con eso, en el segundo libro. El final sin duda te deja con ganas de saber qué será del aquelarre ya que se encuentran en una situación bastante peliaguda. Quizás lo que menos me ha interesado de la historia es la relación entre Tommy y Diego. A ver, no es una mala relación y el romance no eclipsa el resto de la historia (cosa que agradezco porque no soy muy fan del romance)pero, desde mi punto de vista, no es el punto fuerte del libro. Quizás el problema que veo es que hay demasiada carga sexual. Entiendo que entre dos veinteañeros salten chispas pero, sinceramente había momentos en los que no venía a cuento, como cuando tienes un cadáver delante. Espero poder leer pronto la segunda parte y cerrar esta historia. |
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