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Este libro ha sido exactamente lo que me esperaba. No sé si eso es bueno o malo, pero no me ha sorprendido. Adoro a la familia León, y acompañantes, por ese motivo me declaro fan de la Saga Sin Mar, aunque como siempre, hay libros que me han gustado más, y otros que menos. Este diríamos que se encuentra por la mitad hahaha. Amelia es dulzura pura, un amor, y me ha encantado ver como va evolucionando y imponiendo su criterio y su forma de ser. A Einar también lo adoro, nunca mejor dicho, VIKINO MOLÓN. Pero ha sido una historia de amor completamente predecible, y sinceramente a veces me ha resultado algo “cursi”. Los giros que ha ido dando la historia, aunque no me hayan pillado desprevenida, me han gustado, y la han hecho amena y fácil de leer. En definitiva, es un libro que para pasar el rato está bien, un bonito recordatorio de que cada uno es como es y hay que querernos así siempre. Pero…me ha faltado que me haga sentir más, y me ha sobrado un poquito de dramatismo. |
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