 |
Después de la muerte de su madre, Robert regresa a Salmo, el pueblo de su infancia. Robert no ha sido un buen hijo; a pesar de haber aguillotinado su futuro quiere recuperar el tiempo perdido. Se fue de casa siendo un adolescente con una chica que al final le trajo problemas. Robert, en aquella época, quería seguir su propio camino, pero eligió el equivocado. Después de veinte años se reencuentra con la gente que dejo atrás en el pueblo, su hermana Carol y su amigo Johnny pero también se reencontrará con terrores infantiles. La Casa de las Cruces será el centro de esta novela y nos invitará a adentrarnos en las historia de la infancia de Robert. Inmediatamente me recordó a antiguas lecturas de Stephen King. A esas novelas en las que un pintoresco pueblo perdido en un condado de Estados Unidos alberga un misterio. Una casa destartalada estilo colonial parece que esconde algo, un enigma por descubrir y en la que recaen todas las supersticiones locales. Suelen ser este tipo de historias las que de algún modo me atraen. Pero es una atracción casi física, vital. de cuando en cuando, indago para encontrar novelas con historias parecidas. La lectura me proporciona lo que más necesito en este tiempo extraño: distracción. al mismo tiempo me ayuda a conocer nuevos autores y nuevas historias. Los capítulos de esta novela son largos pero están divididos con elipsis o saltos narrativos breves. Pero lo mejor de esta novela es la manera de narrar que tiene David Chevalier. Está correctamente escrita pero además destaca el manejo del lenguaje y el juego de palabras que hacen la delicia de esta obra. Hay una primera parte introductoria que nos explica la vida de Robert, por qué salió a toda prisa de aquel pueblo veinte años atrás, su regreso a Salmo y las cuentas pendientes con el pasado. Es una narración similar al gran maestro Stephen King. Quizá el pero que puedo tener en esta primera parte es la reiteración de las reflexiones sobre la vida y la muerte. En la segunda parte hay un cambio de estilo siendo este más cercano a la literatura de Poe y su mundo oscuro. Es una parte con más dinamismo y acción en la que se hayan las respuestas a las distintas incógnitas de la primera parte. La mezcla de ambos universos, King y Poe, funcionan muy bien y David Chevalier se lucra perfectamente de ambas. Además, esta novela tiene un espíritu ochentero muy seductor. La figura de la Casa de las Cruces puede parecer muy manida y utilizada en la novela de terror. Si echamos la vista atrás encontraremos cientos de casas que ocultan un misterio o acogen fenómenos paranormales pero aquí el autor nos da una vuelta de tuerca a esta figura y nos sorprende con una historia argumentada y sorprendente. Me ha convencido el giro de trama y la capacidad para reinventar un personaje líder de la literatura gótica. Y por alguna extraña razón consiguió ponerme nerviosa y eso que podría considerarme una gran lectora de novelas de terror. En fin, reconozco que ha terminado por atraparme la narración de David Chevalier. Su primera novela Tide Haven cosechó buena críticas y la tengo en el punto de mira como próxima lectura. Enlace: https://www.yoleonovela.com/.. |
>
