Vuelo de reconocimiento

María Castro nos muestra en “Vuelo de reconocimiento” cinco relatos muy diferentes entre ellos. Un corresponsal español en Londres en tiempo franquista cubriendo un combate de boxeo del que nada sabe. Una mujer paraguaya que debe salir de su país para poder salir adelante, dejando atrás a una hija, una mujer alemana antes de la segunda guerra mundial angustiada por la pureza de sus hijos (medio judíos) y sus consecuencias, una mujer engañada por su pareja y una chica que recibe una llamada de su madre en un restaurante.
Para mi el más redondo es, sin duda, “El combate”, contando los entresijos de la vida del corresponsal de la época, su manera de conseguir la información, el día a día de un periodista que trata de alejarse del régimen pero que, de alguna manera, debe ser parte de su propaganda. Sus descripciones cuidadas y concretas nos transportan aun Londres que es para nuestro protagonista una vía de escape de la España franquista.
“En lo alto del dolor” y “Solicitud” marcan la angustia de unas madres que cuidan de sus hijos de maneras diferentes con finales nada edulcorados, y que te llegan a poner el corazón en un puño. Tal vez son las dos historias que más pueden hacerte reflexionar.
Las dos últimas historias, “Memoria, olvido y perdón” y “Horizonte” son tal vez las que me han parecido más flojas. La historia de una mujer engañada no me ha llegado a enganchar ni emocionar y la historia que cierra el libro se queda realmente corta sin producir el impacto que creo pretende.
En general es una obra amena, que se lee bien, con una escritura cuidada pero que no deja un especial poso, una vez leído, no queda mucho en la memoria.