Sarah que vuelve a Oxford tras la muerte de su padre para ver a su abuela Sylvia la mujer que la crió de niña y que ahora sufre Alzheimer. Veremos una evolución en Sarah brutal, afrontando sus miedos y enfrentándose a su pasado. Es terca, decidida, inteligente y valiente. Sylvia, la abuela, no cree que su hijo muriese de forma natural, sino que fue asesinado y Sarah empieza a investigar cada detalle que su abuela recuerda. Esto la llevará a descubrir unos dibujos de unas flores firmadas por un tal Gideon. El problema viene cuando el único que conoce todo este lío es Liam. ¿Quien es Liam? Deberéis leer para saberlo, pero nos va a dar muchos dolores de cabeza, solo diré eso. Sylvia a mi parecer es el personaje más entrañable y especial de la novela. La escritora ha creado un magnífico trabajo mezclando un intenso romance con un complicado pasado que guarda muchos secretos. Dos historias de amor paralelas, dulces, indecisas y reales. Los capítulos protagonizados por Sylvia vienen con una flor dibujada y es totalmente precioso. |