Es de un merito increíble la historia que inventó Lewis Carroll para una niña, Alicia, la verdadera Alicia. Porque si no lo sabéis, Lewis le contó esta historia a una niña, así improvisando e inventando en el momento. Lewis ya había publicado otros libros, pero de matemáticas, ya que era matemático. Pero a Alicia le gustó tanto la historia que le pidió que la escribiera. una lectura ligera, rápida y sorprendentemente amena. Lo que en cierto sentido es sorprendente, pues, no debemos pasar por alto que esta novela se publica en pleno periodo victoriano |