En esta novela, el protagonista decide afeitarse el bigote que lleva luciendo casi toda su vida y nadie, ni su mujer, reacciona al cambio. Es más, su mujer hasta le niega que antes llevase bigote.... Llega un momento que no se sabe si es una broma, si un complot para hacerle pasar por loco, si están locos los demás.... Quizá mis expectativas eran demasiado altas, pero no me ha encantado. La historia, realmente muy original y curiosa , me pega más para un cuento de 30 páginas que para una novela de casi 200, que a pesar de ser corta, se me hizo larga. Eso sí, engancha. Todo el rato quieres seguir leyendo para ver hacia donde va, pareciendo cada vez más y más absurdo. El final, apoteósico. |