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El mundo no es tal y como lo conocemos y el único lugar habitable ahora es el cielo. Casiopea es un zepelín que está habitado por una tripulación muy bien estructurada y cada uno con una misión. Todo indica una vida idílica, pero los personajes que allí viven comienzan a ser conscientes de que pasan cosas muy raras y de las que, hasta ahora, no se habían percatado: desapariciones, cicatrices sin explicaciones, pérdida de memoria, luces en el suelo terrestres aunque supuestamente no hay vida,... Para resolver este misterio deciden hacer una aventura para descubrir la verdad, un camino muy peligroso que les llevará a ir más allá de lo conocido. Estamos ante una novela con toques futuristas, aunque también con una crítica social. En principio parece una trama bastante sencillita y sin muchas complicaciones. La realidad es totalmente diferente. Se trata de una trama con muchos secretos ocultos, donde los personajes parecen esconder todos algo. Una trama llena de secretos, mentiras, amor y amistad. Sobre los personajes, vamos a encontrar un buen elenco de estos y muy variados. Todos ellos están muy bien definidos, con su profundidad, sus pasados y unos perfiles bien marcados. Con la gran mayoría de ellos es muy fácil poder conectar. Otro punto clave es el mundo creado por el autor que, si bien no es muy detallado en ese aspecto, sí vemos lo bastante complejo y extenso que es. La narración de Caronte es muy dinámica y ligera, con muy buenas descripciones. El ritmo es bastante rápido, gracias a que no para de ocurrir cosas que mantiene al lector atrapado, sin mencionar con el toque de misterio que también tiene, y a que los capítulos son cortos. |
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