El libro, al parecer el segundo de la saga, cuenta la historia de Pepa Guindilla y su familia. Resulta que no es la típica familia tradicional, sino que sus padres están divorciados y cada uno de ellos a formado su propia familia, con madrastri, padrastri y hermanastros. El libro es muy divertido, ya que la niña te cuenta su día a día, con sus propias palabras y forma de entender las cosas que suceden a su alrededor, tal y como podría contarlo mi hija de 7 años. A quien, por cierto, le ha encantado la historia y me pide más. Me gusta mucho la forma en que trata las relaciones entre los miembros de las dos familias, el hecho de que se lleven bien y que Pepa tenga dos casas y muchas personas con las que contar. Trata con mucha naturalidad los nuevos tipos de familias que vemos a nuestro alrededor hoy en día y facilita el que los niños lo vean con la mayor normalidad. |