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Vega y Elio crecieron y descubrieron la vida juntos, crearon su propio círculo, hasta que un día se convirtieron en nada. Ahora, diez años más tarde, se vuelven a encontrar en la ciudad que los alejó. Es, obviamente, una historia de segundas oportunidades. Me ha gustado, sobre todo por los protagonistas, ya que los dos son muy potentes y he disfrutado de esa intensidad. Ciertos secundarios también me han conquistado (ejem Damián y Ada). Mi pega es que me ha faltado mucha más reticencia por parte de Vega cuando se reencuentran, se supone que está cabreada/dolida/molesta por el motivo que los separó, pero a mí no me lo ha transmitido lo suficiente. Por lo demás, es una historia bonita cargada de sentimientos que hace viajar a Ámsterdam.
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