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Dos almas atrapadas en unas vidas que no desean. Beatriz, cansada de la suya, desea huir, liberarse. Diego vive inmerso en una dura vida con una persona a la que ya no ama. Candela, un alma en pena. 💕 A veces la vida nos obliga a tomar decisiones empujados por la necesidad de no dañar el corazón de otras personas. Eso es lo que le pasa a Diego y a su novia Candela. Pero al tomarlas, dañas a otras y las haces pedacitos, cicatrices difíciles de reparar. Como bien narra la autora en la novela, y aludiendo a la técnica japonesa “el kintsugi”, dichas cicatrices no se disimulan, sino que se remarcan y se convierten en algo hermoso, en este caso y hablando de los corazones de los protagonistas, les ayudan a recuperarse y sobrellevarlas. ✍Lo primero que me llamó la atención fue su maravillosa portada y su MAGNIFICO TITULO, sí, con mayúsculas, porque intuía que había escondida una gran historia sin leer la sinopsis si quiera. Su lenguaje sencillo y cercano, pero a la vez justo y necesario, te sumerge en las escenas de una forma que te olvidas de todo. Es una historia muy romántica, bonita, y dura. La considero dura porque trata un problema mental muy difícil como es la depresión y otro que no quiero desvelar para que la leáis. 💞 No es un amor predecible, temes un final inesperado, no sabes por dónde va a ir el desenlace porque hay varias opciones en tu cabeza, al menos en la mía las había. Ha sido un libro precioso, entrañable, con escenas muy románticas, algunas subidas de tono…mi querida Scarlett, y la pregunta del final… 🤫¿Volvería a leer este libro? Pues sí. No soy de leer libros dos veces porque tenemos tantos en lista de espera, pero sé que algún día lo haré. Felicidades , Scarlett, eres una crack. |
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