Los destrozos

𝘓𝘰𝘴 𝘥𝘦𝘴𝘵𝘳𝘰𝘻𝘰𝘴 de 𝘉𝘳𝘦𝘵 𝘌. 𝘌𝘭𝘭𝘪𝘴 ha sido mi gran descubrimiento del mes. Me ha mantenido estas semanas obsesionado, sumergido en un vórtice hipnótico hasta la última página.

Voy a prescindir de compartiros la sinopsis. Solo os diré que esta historia es un viaje que rezuma opulencia, frivolidad, deseo sex*al, desenfreno adolescente, coqueteos con determinadas sustancias, sectas y ases¡nos en serie. Todo ello envuelto en una crisálida de nostalgia ochentera que parece trasladarnos de lleno a un slasher de la época.

La pérdida de la inocencia y el salto hacia la madurez bajo el peso del desamor, el trauma, y la muerte, son algunos de los temas que se abordan durante esta vorágine de violencia y desenfreno EXPLÍCITO.

Sin duda, lo que más me ha gustado ha sido el personaje principal. Pasará a la lista de los que no voy a olvidar nunca. A pesar de tener sus ambigüedades y haberme molestado en ciertas ocasiones, es complejo, poliédrico, capaz de generar confunsión, desconfianza, rechazo, y al mismo tiempo empatía, ternura, o lástima.

Por si fuera poco, cada escena viene condimentada por la música que suena en ese momento, casi como si tuvieran banda sonora propia (de hecho, existe una lista de Spotify con todas las canciones que aparecen aquí). Las referencias musicales vertebran toda la narración, y a ellas se suman referencias cinematrogáficas, literarias, artísticas, o geográficas, una marea de detalles que al principio me resultó un recurso algo ortopédico y forzado, pero que conforme iba avanzando la historia descubrí que le proporcionaba textura y contexto a la ambientación.

Es la primera vez que leo un libro del autor (American Psycho está en mi radar ahora), pero con 𝘓𝘰𝘴 𝘥𝘦𝘴𝘵𝘳𝘰𝘻𝘰𝘴 me queda claro que 𝘉𝘳𝘦𝘵 𝘌. 𝘌𝘭𝘭𝘪𝘴 es un artesano literario con la capacidad suficiente para erigir una novela cargada de terror, erotismo, y provocación, con un alto porcentaje de componente autobiográfico. En palabras del autor: “En Estados Unidos creen que este libro roza la pornografía, pero es lo que viví en el instituto".