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La narrativa de Liliana Blum es excepcional en este libro al igual que en sus otras obras, y a pesar de que nos tiene acostumbrados a la crudeza (y no por ser un libro juvenil la abandona aquí), si trata el tema de una manera menos brutal para encajar con la audiencia a la que va dirigido. La historia es buena trata una problemática social que ya de por sí es horrible de un manera natural con toques fantásticos para aplicar la justicia que a muchos nos gustaría ver en casos como estos. Aún así, creo que de haberlo leído a mis 10-15 años, le hubiera dado las cinco estrellas. |
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