Una novela corta, narrada de forma clara, honesta y desapasionada. Con las palabras y silencios necesarios, ni una más, ni uno menos. Una historia aparentemente cotidiana, inocua, como la de miles de mujeres, abrumadas por el difícil equilibrio entre maternidad y la búsqueda de un sentido vital propio, ajeno a su versión materna. Vivian Carpenter es una mujer aterrada por la sensación de sentirse sola y olvidada. En su búsqueda desesperada de amor, de admiración, de validación, plagada de desengaños y naufragios, sólo existe una constante, su hijo, David. Pero esos dos papeles en la vida de Vivian, madre y mujer se enfrentan y se repelen entre sí, no hay posibilidad de coexistir y el campo de batalla es su hijo, ese amor inmutable y duradero frente al desfile de hombres y amantes que vienen y ven. A medida que avanzamos en la historia de Vivian y David, el relato se vuelve más turbio, crudo y asfixiante, hacia un desenlace que no por menos anticipado, deja de ser desgarrador. Ha sido una lectura intensa y abrumadora. Gracias a @babelioenespanol |