Catrin es una chica huérfana que trabaja en la construcción del Sanctum detectando fallos en el andamiaje. Una noche, mientras trabaja, es testigo de un asesinato y se ve envuelta en la resolución del mismo. Con esta premisa nos adentramos en una historia que combina policíaca y fantasía de una forma que atrapa por completo. La trama policial me ha hecho dudar de todos los personajes en algún punto y yo, que no leo este género, lo he disfrutado un montón. Necesitaba seguir y seguir para descubrir al asesino de mano de Catrin. En cuanto al sistema de magia, me ha resultado original y bonito. Vemos cómo Catrin va descubriendo sus poderes al mismo tiempo que se van desvelando incógnitas de su pasado. Este sistema está basado en la luz de la luna y me ha gustado mucho cómo se usa y desarrolla a lo largo de la historia. En cuanto a los personajes, solo voy a hablar de Catrin, es preferible que conozcáis vosotros a los demás para que no influya en vuestras dudas y teorías sobre el asesino. Catrin es una chica fuerte y decidida que está dispuesta a todo por proteger a los que quiere. Me ha gustado mucho su evolución como personaje y cómo se enfrenta a lo que está pasando. También tiene una pequeña dosis de romance, pero no afecta demasiado a la trama y no le roba protagonismo en absoluto. El final queda cerrado en cuanto al caso, pero la autora deja pie a una segunda parte que estoy deseando poder leer. En resumen, una historia que combina crímenes y fantasía, con una atmósfera un tanto oscura, iluminada por la luz de la luna... |